Del barco taller es un entramado de pintoras y pintores que compartimos un espacio para trabajar y soñar. Es a la vez un proyecto y un lugar. Los tripulantes somos: Luis Alfonsin, Titina Bustelo, Héctor Depino, Ninot Kayor, Miriam Kriger, Hernan Martínez Glattli, Claudia Martínez y Esteban Videla. https://www.facebook.com/delbarcotaller
sábado, 14 de noviembre de 2015
domingo, 8 de noviembre de 2015
lunes, 2 de noviembre de 2015
viernes, 4 de septiembre de 2015
domingo, 30 de agosto de 2015
martes, 25 de agosto de 2015
Del Barco Azul.... en la Simón Bolivar- Inaugura Viernes 29 de Agosto
Muestra de concurrentes a los talleres de Esteban Videla (Ventana Azul) y al de Ninot Kayor en taller Del Barco.
En la peña estarán:
Pura Vida (Música andina)
Bum Racatá (taller de percusión afroamericana)
Nicolás Cardoso (charanguista)
Bum Racatá (taller de percusión afroamericana)
Nicolás Cardoso (charanguista)
sábado, 22 de agosto de 2015
Martín Cascallar / Canciones de amor.
Martín Cascallar, concurrente al taller Ventana Azul, expone en el taller Del Barco. Inaugura el sábado 22, a las 17 hs y permanece todo septiembre.
Martín es un joven pintor que asiste al taller Ventana Azul a pintar con Esteban Videla desde hace un año y medio. Expondrá 14 dibujos (grafito) sobre papel en una muestra que titula Canciones de amor.
martes, 28 de julio de 2015
sábado, 18 de julio de 2015
viernes, 19 de junio de 2015
Rumbo y Deriva - Exposición en el Taller / Junio 2015 - HERNÁN MARTINEZ GLATTLI
Pusimos rumbo al horizonte un día. Orientamos la proa Del Barco en la dirección de la expectativa creadora. Y vimos que la corriente del grupo nos llevaba con una deriva que no habíamos tenido en cuenta, modificando el camino primitivo. Nos planteamos un rumbo y nos sorprendió la deriva. Y la aceptamos como un cómplice que da direccíón a nuestro camino.
Herán Martínez Glattli
Rumbo y Deriva - Exposición en el Taller / Junio 2015 - HÉCTOR DEPINO
“Retrato en azul”: diez años atrás comenzaron los primeros pasos en el orden de la actividad plástica.
Modelo vivo y escuela-taller de Guillermo Roux, me dieron la oportunidad de obtener mínimos instrumentos para ir apropiándome de la imagen y disfrutar enormemente de la experiencia de encontrar en la representación, aquello que el estímulo me ofrecía o que entendía que me ofrecía.
Varios años, mucho esfuerzo, no sin momentos de desaliento, también placer, junto con la guía de Ariel Mlynarzewic derivaron en un mayor compromiso con la pintura.
Así, la expresión fue acompañando al dibujo, no abandonándolo, y en esa búsqueda, la materia fue tomando un lugar más determinante, tanto en el gesto, la acción y la producción como en la satisfacción y gusto por la realización.
“Desnudo II” y “Escena de trabajo” son algunos puntos de anclado, no definitivos, en las derivas que el rumbo original indicó.
Rumbo y Deriva - Exposición en el Taller/ Junio 2015 - LUIS ALFONSIN
En un lejano 2010 , y con el empujón que me diera Claudia, comencé a pintar .Confieso que me sentí muy inhibido al observar el elevado nivel que había en el taller al cual ella venía concurriendo, y del cual ahora yo también formaba parte.
Allí tuve la suerte de conocer un grupo de personas maravilloso , y al poco tiempo nuestra afinidad dio lugar a la formación del grupo Del Barco Taller.Con la excusa de seguir juntándonos a hacer lo que nos gusta , es que emprendimos sin rumbo predestinado una fantástica y estimulante seguidilla de distintas actividades y muestras.
Ahora seguimos descubriendo nuevos espacios , siempre con gran entusiasmo y energía positiva.
Rumbo y Deriva - Exposición en el Taller/ Junio 2015 - TITINA BUSTELO
Cuesta reconocerme en lo hecho, como si el silencio del tiempo deshilvanara mi historia.
Mirar, indagar, hacer, dudar, equivocarme e insistir.
Nada puede ser establecido ni confirmado.
Busco lo que no existe para mis ojos y termino deambulando por mis sombras o asegurándome la supervivencia.
Ni tan cerca ni tan lejos, como dice Berger.
Sera cuestión de abrigarme en el hermoso desconcierto de alcanzar lo q no busco.
Titina Bustelo.
Rumbo y deriva - Exposición en el Taller / Junio 2015 - ESTEBAN VIDELA
Tenía 11 años cuando se hizo consciente el rumbo por primera vez. Estaba en séptimo grado y al igual que la mayoría de los días que llegaba a casa me ponía a dibujar, posiblemente porque había muchas cosas que no podía verbalizar. Copiaba superhéroes, personajes de cómics, de películas de animación. Ese día dibujé a Condorito, al terminarlo me di cuenta que había algo diferente con los anteriores que había realizado, se parecía y eso me enorgulleció. Tanto que decidí recortarlo y pegarlo en una hoja de mejor calidad. Esa hoja la archivé en unas carpetas que mi padre traía del trabajo.
En la actualidad en mi biblioteca se descubren, camufladas entre los libros, cuatro carpetas de las que traía mi padre con cientos de esos dibujos.
De esta manera se hizo presente el rumbo y desde ese momento lo que he intentado es volver a vivenciar esa sensación que tuve cuando dibujé a Condorito. Talleres, la escuela de Bellas Artes, el instituto de Arte del Teatro Colón. Guiado por el rumbo.
Sin embargo, en algún momento apareció la deriva. Fue cuando finalicé Bellas Artes. La pregunta que me atormentaba era que hacer con todo eso que había aprehendido, no me sentía bien, no me hacía bien repetir fórmulas de manual que no tenía dudas que funcionaban, no quería racionalizar más el proceso de la pintura. La deriva me llevó hasta el taller de Ariel Mlynarzewicz, encontré un maestro que me guió pero no indicándome un rumbo, sino transitando la deriva. En ese tránsito entendí que el rumbo nunca lo había perdido, el rumbo era, eso mismo que a los once años me hacía tan bien, el acto de pintar y dibujar, sin importar el resultado, lo importante estaba en el proceso. Lo importante está en el proceso.
De esta manera empecé a perder cada vez más el rumbo dentro de la pintura, intenté despegar la cabeza del acto de pintar, intenté que algo me atravesara en el proceso. En jornadas de tres o cuatro horas podía pasar solamente unos segundos, pero esos segundos eran comparables a esa vivencia infantil cuando sentía orgullo por ese dibujo que había realizado. Como contrapunto apareció con más claridad el motor del acto de pintar, eso era el rumbo.
Pinto porque no puedo dejar de hacerlo. Pinto porque es mi forma de comprender el mundo. Pinto por esos segundos en los que la cabeza para. Pinto porque ese es mi rumbo. Pinto porque en cada transcurrir del proceso aparece la deriva y esa deriva me lleva a un nuevo rumbo, pero sin embargo, cuando llego a ese puerto, ya todo está brumoso nuevamente, de forma tal que de vuelta me encuentro a la deriva. Eso es lo mágico de este proceso, eso es lo mágico de la pintura. Es infinita.
Buenos Aires, 5 de junio de 2015.
RUMBO Y DERIVA - Exposición en el taller - Junio 2015 / CLAUDIA MARTÍNEZ
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Claudia Martínez - "De un desnudo de Degas" (2003) - |
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Claudia Martínez - " Jorge, el de los laberintos" - 2012 |
Claudia Martínez - Desborde II - 2015 |
RUMBO Y DERIVA
Es difícil afirmar que es primero, si es quien pinta el que lleva adelante un proceso o es lo pintado lo que marca rumbo al que pinta. Las dos cosas suceden, vaya a saber una en qué orden y proporción.
Lo que es claro, mirando lo pintado en estos años, es que soy pintando y presumo estar recorriendo un camino, que por lo consciente, no fue fijado de antemano más que como una sutil preferencia, al punto que no podría asegurar si es rumbo o deriva. Camino que hoy compongo y describo por sensaciones y pensamientos que persisten en el acto mismo de pintar.
Diría que en mi trabajo es rumbo la deriva, la búsqueda del extravío, de la potencia fabuladora, del poder de lo falso. Eso me convoca una y otra vez, insisto en el trabajo de componer abierta a lo que pase, transitando una topografía simple, buscando construir una intensidad, en la que forma y contenido busquen huir. No sé si esto puede observarse en lo pintado, es rumbo. Es el ensueño que acompaña la tarea.
Por ese camino siento que puedo ser honesta, es decir coherente con mis posibilidades, habilidades, determinaciones y preferencias.
Diría que voy pintando para constatar la fuerza creadora de la vida. No es idílico, no es sin malestar, no lleva a buen rumbo. Solo permite ese juego indiscernible de experimentación y vida.
Claudia Martínez
martes, 16 de junio de 2015
RUMBO Y DERIVA - Exposición en el taller . Junio 2015 / NINOT KAYOR
Ninot Kayor -"Serie Primeros desnudos 5 "- 2004 - 1.10 x 0.90 m
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Ninot Kayor -"Serie Hijos e Hijas - Lis "- 2010 - 1.00 x 0.70 m |
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Durante el 2004 pinté solo desnudos, con modelo vivo. EL último acrílico que hice, sobre tela, fue el quinto, que es el que expongo en esta muestra: Serie Primeros desnudos 5. Luego, durante los siguientes tres años, concurriendo al taller particular de Mlynarzewicz, pinté retratos de mis hijas e hijos, de parientes, de amigas y de algunos personajes. A mi me gustaban, pero a mis familiares no. Argüían que no se parecían a ellos, o al menos no se parecían lo suficiente, o de la forma que ellos deseaban. Este malestar de mis parientes me impulsó a buscar una manera de lograr un parecido indiscutible. Creo que lo logré luego de intentarlo durante 2 años. Este retrato de Lis que expongo en esta muestra es un ejemplo: Serie Hijos e hijas. Lis. En el 2010 creo que ya pude hacer retratos con ese parecido que tanto reclaman las y los retratados.
A partir, más o menos de ese año me he empeñado en profundizar esta deriva realista, con tenacidad obsesiva. Un buen ejemplo de ello es esta tercera obra del 2013 que presento en esta exposición: Serie Pasillo 10. Las gatas de Patricia. Quizá mi aficción por la fotografía me lleva a la pintura realista, buscando detener en el tiempo una imagen que quiero conservar pero dándolo unos colores y una atmósfera que las cámaras aún no consiguen ofrecer, al menos con facilidad.
Ninot Kayor
martes, 9 de junio de 2015
martes, 26 de mayo de 2015
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